El diario de mis gastos

¿A cuántos no nos ha pasado que al final del mes estamos prácticamente ahogados y con el agua hasta el cuello esperando a que llegue el milagroso pago por nuestro trabajo?

Debo decirles que el proceso para determinar nuestros gastos y poder controlarlos paulatinamente, es muy parecido al que hacen los alcohólicos anónimos... 

¿Quéee? 

-Sí, el primer paso es aceptar que no estamos organizando nuestras finanzas de manera correcta. Por ello, es que a continuación les muestro el decálogo del buen administrador:

 (El decálogo completo, al seguir el link)

1) Gasto antes de tenerlo.

Si antes de recibir los ingresos por los que he trabajado, ya tengo gastado o comprometido algo en las tarjetas de crédito, mucho cuidado, debo aceptar que estoy haciendo algo mal.

2) Acepto mi responsabilidad, necesito ayuda.

De acuerdo, este es un buen avance, ahora depende de mí asumir el compromiso para poder salir adelante.

3) ¿Me falla la memoria?

Ahora que deseo salir de esta pesadilla que se repite recurrentemente al final de cada mes, existe una receta infalible para mejorar la memoria de lo que hemos gastado durante ese periodo. Y lo que debo hacer es llevar un registro en papel, en nuestro teléfono móvil, o en cualquier medio electrónico de todos los gastos que voy realizando todos los días. La manera más fácil es conservar los recibos o tickets de compra y apuntar los detalles una vez que encontremos 5 minutos de calma en el día. Repetir esta acción durante un mes completo, desde el día 1 al 30 ó 31.

4) ¡No quiero ver!

Claro, cuando llega el final del mes, y ahora que tengo registrado todo lo que he gastado, no quiero ni voltear a ver el resultado... ¡Mucho menos sumar el total!...

5) Superar el miedo.

Ya he llegado hasta este punto, debo afrontar mi responsabilidad y sumar todos los gastos, y digo TODOS sin dejar fuera nada, mucho menos descontarlo o adelantarme a ingresos que obtendré después. Lo que estoy sumando es únicamente la parte de mis gastos.

6) Azul, verde, amarillo...

Ahora ya tengo el total de lo que he gastado, pero debo agrupar mis gastos por rubros, por ejemplo: Alquiler, comida, transporte, diversión, ropa y accesorios, educación, deporte, créditos, etc.

7) ¿Quién me pega más?

Con los grupos de gasto que he identificado, les asignaré un porcentaje del 100% que me representa el total, por ejemplo: Alquiler (30%), comida (15%), transporte (10%), etc, así hasta cubrir todos los rubros.

8) ¡Ya te ví!

Ahora que tengo ordenados los gastos, identifico cuál es el que me representa el mayor porcentaje de desembolso, y determino a partir de ahí una estrategia

9) No me quedó muy claro... ¿Cómo?

Fácil, digamos que siguiendo mi ejemplo, el alquiler de la casa es lo que me representa el desembolso mayor y que debido a eso, no puedo llegar con mi presupuesto al final de cada mes - Entonces debo buscar otro lugar donde vivir que sea más económico.

El segundo lugar de mis porcentajes, lo ocupa mis gastos en alimentación, ¿que hago? - Busco ofertas en días especiales de rebajas para comprar alimentos, o cambio de supermercado por otro con precios más económicos, adquiero la marca más barata del producto que normalmente consumo, y como ésta, muchas sugerencias que nos disminuyan ese alto impacto en el total de los gastos.

10) Vuelta y vuelta

Repito esto al menos 4 meses, .... y el resultado es excelente.

 Recordemos que la disciplina y la constancia serán determinantes para conseguir un buen desempeño financiero.

¡Saludos y hasta pronto!